¡Galopa, galopa, mocito! por los cálidos mares de transparentes besos. ¡No temas, mi niño! ¡Caballito de mar! Las nubes de colores te abrazan en el nuevo cuarto de jugar. ¿Oyes el canto del viento? Arrullará de nanas tu sueño con las luces encendidas para que no tengas miedo.
Texto agregado el 09-05-2006, y leído por 121 visitantes. (0 votos)