Me acuesto

Ya señores, el día se acabó,
la luna ya se asomó,
y todo de sombras
se cubrió.

Las estrellas me contemplan
en el descanso inoportuno,
que a pesar de tanta ansiedad
aún no caigo en algún
desatino inadvertido
o proclamado con anticipación
porque hacer eso sería
para muchos
una causa de dolor.

Y se vé como la pieza es la playa,
las gaviotas suenan, qué realidad
mi cabezazo goleador
que se repite una y otra vez
pero estoy en una silla,
viendo el televisor.

Cómo pesan los párpados!

La mente se me desvanece
hasta apagar su último switch
será hasta mañana
al desayuno donde podrá
mascar algún sandwich. (qué rima!)

Ojalá que duerma
y la panza no me duela,
que sino la casa entera
reclamará por tal atmósfera
aunque poco sentido tenga
más que dejar salir
lo que por naturaleza propia
expulsarse deba.

Buenas noches, muchas gracias.