Placer de serte Infiel

Te desnudo,
Desesperado arrojo tus ruidosas ropas
en cualquier lado.
Sin importar que nos vean, ni el que dirán.
Tiemblo de emoción, cual adolescente inexperto.
Ardo; por tu dulce deseo,
mis manos te acercan a mí,
más, y más y...
Navegas en mi boca
Juguetes en mi lengua
Desatando en mí
Torbellinos de abrasadora satisfacción.
Te mueves, te fundes, te disuelves
Penetrando en mi ser.
El ébano-ambarino de tu piel
igual que pliegues al viento
Uno a uno van cayendo
Como afrodisíaca danza de los siete velos
y..
cuando eres nada en mí
busco a otro ser como tú y...
otra vez comienza el deseo.
Para reiniciar el juego del placer.
No hay lugar donde no repita
este juego loco, apasionado
Las plazas, cines, trenes, confiterías,
Colectivos, taxis.
Todo lugar es un sitio ideal para el placer
Todos saben de mi delirante, frenético deseo.
Y a la vista de todos,
o no,
vuelvo al juego de desnudar, acercar su cuerpo
Nuevos placeres me inundan,
navegan en mi boca.
Juguetean en mi lengua,
Mientras sus ropas crepitantes como fuego,
yacen desordenadas a mis pies.
A veces me alejo de ellas llevándole a otros lugares,
sin dejar de jugar con mi boca y ese ser jugar con ella.
Y... luego, pasan horas y comienzo otra vez.
Buscando quien me de sus dulzuras y yo comiendo,
con la pasión que me provoca, un nuevo cuerpo.
Perdón, por este placer de serte infiel, con otro como tú,
ébano-ambarino y sabroso caramelo.