Podría conseguir que recargados enunciados me recubrieran. Podría incluso desentumecer la remota paráfrasis que anda latente en mí.
Lo importante sería, en todo caso, aprovechar cada costura de esta mortaja, que ahora esculpo;en el último tramo hacia el cadalso.
Mas...¡no me da la gana! Quiero que la última página de la libreta que ha zurcido mi vida dos añitos y pico, vomite lo que soy...feliz

Veo luces, y sombras, cada día (como cualquiera que haga vida tras el alba y tras el atardecer)... No tengo relaciones humanas, las vivo, por triplicado, a todas horas...Y me enriquecen de una manera que nunca imaginé incluso, cuando su forma de dirigirse a mí, es con un alarido...Feliz.

Con unas relaciones familiares que me ayudan a crecer, pues, cada día les aguanto menos, lo que significa que les quiero más desde lo que soy ahora.

Paseo, sobrevivo, hago el vago, sonrío...feliz. Tanto que el hueco que me queda para expresarlo, desaparece aquí...(Hasta que me compre otro cuaderno)


(Comparto aquí, con el que guste, la última página de mi cuaderno de escribir. Por lo que os ruego, que repetéis que me extienda. Ha sido, demasiado tiempo rellenándolo con mi alma... imaginad, la tristeza que sentí cuando vi que sólo quedaban un par de caras. Sin quererlo, éstas han sido el conjunto de letras que lo han completado, lo comparto por ser el final de algo muy importante y porque sé que ninguna de mis libretas de escritura será igual, así que no juzguéis su corrección, ni su estilo, intentad comprenderme, o acordaos de cuándo sentistéis lo mismo. Durará poco colgado...)