Buenas noches amor mío

Cierra tus ojos resplandores, que ya el sol muere
entre nubes y horizontes; las estrellas renacen entre tanto estruendo de rayos y tu dormir soñando es un devenir de sutiles desmayos.

Por lo que te amo, por lo que me incitas, por lo que eres, por lo que me produces, por lo que me marcas,
por tus pasos entre las hierbas, por tu resplandecer, por lo que me provocas, por mis ganas
por mis ansias renovadas, por estos versos que escribo hoy; soy para ti todo lo que soy.

Sueña amor con senderos recién hechos sobre los cardos, con noches de luna llena escuchando los sonidos de la tierra, vuela con tu calidez y deja atrás las sombras, que es a ti a quien mi boca nombra.

Versos escritos sobre una cubrecama, mirando tus suspiros cadenciosos, tu negro cabello enrédandose en la hiedra de los símbolos, entre mis manos color piedra, contemplando la inmovilidad tan atractiva y ese pacífico silencio que me hace escribirte estas letras aunque sea con tu boca inmóvil, aunque sea con tus ojos cerrados.

No me importa la consonancia, sólo me fijo en tu respirar, pareciera un resonar de sirenas
perdidas en el tiempo cantando por llamar la atención para que su cautivadora belleza
irrumpa en el corazón de algún observador distraído.

Mas yo no estoy distraído estoy aquí contemplándote y esto no me lo pierdo ni aunque fuese sentencia a morir lo que me estuviera afligiendo.

Qué lástima que tengas que despertar, pero si no lo haces no me podrás acompañar en aquel balcón a mirar el mar, ese mar en una tarde nubosa, con su canto arroncado de ola tras ola con el viento besando nuestros rostros y el calor de nuestros cuerpos abrazados ante esos estruendos.

Déjame girar en este lecho y fijarme en tu morena desnudez para llenarla de tibios besos aunque despiertes sólo para avisarte que un nuevo día llegó
y que este gran desvelo en vano no fue, dame tu mano para levantarte aunque tu rostro y tu peinado
según tú no sean los mejores a mi me pareces
la tierra dando a luz sus mejores flores.

En este día quisiera decirte lo mucho que te amo,
y que a pesar de tanto sufrir este corazón sólo por ti y para ti encuentra una buena razón para seguir con su latir.

Pero eso es adelantarse a los hechos, estoy a tu lado contemplando tu soñar aunque no sería mal final es más, siento dentro mi pecho que así no más será.

Si te despertara todo lo arruinaría, por eso es mejor que duermas y así quedarme contigo soñando el mismo sueño, a que somos dueños del amor y caminamos por calles de farol de la mano y sin temor besando tu boca en cada esquina solamente por denunciar a cada instante, a cada rato que de quererte yo no me canso.

Luces mortecinas que me iluminan dejen de alumbrar, que ya amanece y la madrugada arranca por la noche y sin remedio de tanta luz junta y de vivir con tal asedio.

Buenas noches amor mío...epa!, ya amaneció.