como la poca luz de oroño perjudicado y pequeñisimo el rocio de la tarde como otra muchas veces ha no ser nunca hablaldo,,, complisisimo_ de las penas y sin gritar callado, sumerguiendo mi cara de verguenza.. la hundiré bien hondo asta llegar al la humeda terraquea, favor y verguenza caminan en la misma_ senda que el desprecio y promesas... y ante de todo estaré precipitado a no escuchar.. Juan_Poeta
Texto agregado el 27-04-2006, y leído por 236 visitantes. (1 voto)