¡-la luz.
la primera lampara fué la luna; la segunda la hoguera; la tercera las velas. Despues todas las lucecillas de la cuarta lampara.
- no hace mucho tiempo que las casas se iluminaban con ferocidad, ahora se llevan las luces bajas, discretas, las que hacen sombras en los suelos y paredes.
Se prefiere la luz personal, para leer un libro o escribir la carta en una caja encerrada y magica:
quizas llegue un dia en que nosotros mismos seamos productores de luz como algunos seres vivientes.

¡-EL DORMITORIO. estancia principal de nuestras vidas, las luces son singularmente delicadas.
deberia haber luces para nacer; para amar ; para morir;
la luz de nacer seria la del alba; la de amar, la del mediodia, la de morir, la del crepusculo:

¡- EL ARMARIO;- el hombre antiguo tenia pocas cosas que guardar.
al principio se guardaban las cosas de valor, luego las cosas de valor escasearon y se guardaban las de uso, van desapareciendo los armarios de los dormitorios,
sin embargo eran un encanto para las horas de insomnio, porque solo tratando de recordar las cosas guardadas en ellas venia el sueño:
- no es la carcoma la que suena por la noche en el interior de los armarios, sino el dialogo irritado, la protesta de los objetos alli encerrados sin motivos:

¡- LA MESITA DE NOCHE. sigue siendo precisa junto al lecho, en ella esta la luz, las medicinas el libro, la radio, y, como no el odiado despertador.
- los cajones tan inutiles como las cosas que guardamos en ellos una pila, un lapiz. papeles. una onza de chocolate envuelta.

¡- LA COMODA. en ella se solia guardar a ropa de cama bordada bien dobladita, las sabanas blanca como la nieve y con ese olor a limpio campestre, y a veces recuerdos familiares, se venian a la memoria todos los nacimientos de la familia. Esas comodas panzudas en las cuales se guardaban toda la tela necesaria para izar una gran vela, En la memoria de todos hay siempre una gran comoda, cuyo olor inconfundible nos lleva a otro tiempo y dentro de su gran panza nos consta que siempre estuvo guardado un papel con nuestro destino escrito:

¡-LA CAMA, en ella se nace, en ella se sueña, en ella se muere.
en ella se liberan todas nuestras pasiones, nuestras soledades, nuestros silencio solo roto por el llanto, nuestras alegria por el despertar cada dia.
-- pero a casi nadie se le ocurre presumir de buena cama propia, hasta que se duerme en cama ajena;
- No nos importa que dentro de mil años las camas sean mucho mejores que las nuestras; para entonces ya se nos habra pasado el sueño.

¡- En mi niñez, cada vez que mi abuela me llevaba a la cama, le solia decir.
¡- abuela quien habrá inventado la cama!
y ella me respondia siempre
¡-- un flojo !