Para serte sincero

El amor es de todo,
de todo hay en el mundo
y en el mundo
por siempre habrá
ladrones, policías y amantes
prostitutas, amigas y esposos
políticos, mentirosos y señores
como de todo soy
y de todo es el amor
es por eso que los amo a todos.

Mas el amor que entrego
no se entiende con el que llega
y toda la vida la veo
como pidiendo algún ruego.

Parto a buscar el amor perdido
por lo que tantas veces he pedido
por lo que tantas veces he sufrido
en mi respirar, el respirar
de un amor desconocido.

Por lo que tantas veces he dicho
ay corazón mío
por lo que muchas veces he reído
parche, aro, parche corazoncito.

Vuelca corazón todo tu hablar
que las cadenas se han de soltar
que el viento hiriente va a parar
y el perro quebranto ha de cesar.

Por lo que tantas veces
de vino he reventado
hablando de viejas pasiones
en una piedra sentado.

Por lo que tantas veces he puteado
al mundo y a lo creado
de bronca implusado
por no tener lo amado.

Manos al cielo y dedos al aire
cara sonriente y rostro al sol
cuerpo erecto y frente con calor
las sienes palpitan
y retumba el corazón.

Por lo que tantas veces
no he podido olvidarte
por lo que pocas veces
he podido calmarme
estos versos son para ti
mi dulce y bella madre.

Por lo que tantas veces
me miro al ombligo
y recuerdo los rulos de niño,
por lo que tantas veces
pido por tu descanso
por lo que tantas veces
hasta mi casa llora temblando.

Por lo que tantas veces
no he podido creer tal realidad,
por lo que tantas veces
a la mierda todo
mandar he querido.

Por lo que tantas veces
risas nos arrancaste,
ternura nos entregaste
y la leche nos preparaste.

Penas he llorado, no lo niego
de esas que son bien grandes
pero la memoria es fuerte
así que no te agrandes.

Suelta y deja libre
a este loco salvaje
que a pesar de todo lo vivido,
sacó bastante coraje.

Adiós Mamá. Hasta siempre.