-Aztaroth- dijo Petrov llamandolo inquisitivamente- Ven aqui bestia infernal, seras el teniente de este horrendo ejercito de bestias y tu mision comienza ahora... Destruye la Quimera y la eternidad se te sera entregada. Moloch confia en ti, el puño rojo te ofrece la energia y la fuerza, ¡ahora ve!
La bestia que no poseia mandibula inferior solo atino a gruñir y aullar en la noche que comenzaba, las otras bestias compartian emociones colectivas y levantaban los brazos mientras los portales se cerraban a sus espaldas, la gran aura mortifere verde se tomaba las posiciones de los alrededores de la Casa de los Mil Gritos cuando a lo lejos se escucho el despertar de los otros.
Petrov elevo la mirada y vio como la vengala cruzaba los cielos nocturnos, la Acracia estaba preparada ya, Nueva Cartago iluminada en el cerro mas alto indicaba accion. Por otra parte el aura azul de la Quimera rodeaba los 5 puntos correspondientes a El Lugar, La Casa de las Quimeras, La Fundacion, El Eden y arriba de un gran edificio, Eric.
Las sirenas indicaban que ya los Desviantes estaban preparandose y eso a la vez le decia a Avatar que debia desplegar sus fuerzas para proteger la Corporacion. Colosos, Pilotos y Agentes tomaron posiciones en distintos puntos del sector, mientras ordenes de generales eran dadas en la Base Militar y las noticias informaban en el Canal C-V.
-Es tiempo Inquisidor- le dijo Moloch en su mente a Petrov- Es ahora o nunca... Sabes que tu mision debe ser cumplida en un rango de tiempo Ivanovich, sino es mejor prepararse para tu peor pesadilla.
-No lo defraudare mi señor- cntesto algo nerviosos y molesto Petrov- Hare lo que me este destinado y que las fuerzas del Abismo me acompañen y me den fuerza para ganar en estas noches sangrientas.
-Que asi sea- se apagaba la voz del antiguo jamas conocido- Que asi sea...
Petrov no tenia conocimiento de lo que el era en realidad: un juguete mas para la gran arma que se venia tramando desde los tiempos incognitivos del hombre en el Abismo, la era Baltazo. La gran era que caeria en la Tierra y que haria sucumbir a todo aquel que se le interpusiera. Moloch y sus secuaces ya habian encontrado el cuerpo perfecto del martir mas maldito en toda la historia. En él reencarnarian el gran poder del alma de Baltazo, un ser superior a todos los Inquisidores, y con el los mas atroces monstruos y personajes jamas oidos o vistos.
La Quimera estaba preparada para ese ataque, Eric tenia esa nocion desde hace mucho y gracias a su poder el pretendia proteger el castillo a toda costa hasta la llegada de Lazaro y Vicente nuevamente. Lazaro por su parte preparaba su propia emboscada anti Abismal en el centro de la ciudad y no le costaria nada, ya que solo bastaba con llamar la atencion de los computarizados cyborgs de la Corporacion y utilizarlos como fuerza de choque contra las hordas del Inquisidor Ivanovich.
Vicente por su parte caminaba por los techos de la ciudad buscando alguna bestia que se hubiese perdido de rumbo y aniquilarla con sus ya extremos poderes, pero alguien ya lo habia visto y él se transformaria en el cazado pocos minutos despues.
-¿Buscas algo?- sono la voz ronca y mancillada- Pequeño intruso aqui vas a quedar.
-Pues veamos que tienes bajo la manga bastardo Abismal.
Petrov lo habia reconocido a lo lejos despues de dejar unos cuantos engendros encargandose de unos soldados acracios. Ahora la sangre del ojo izquierdo brotaba mas que nunca, indicando que no estaba de humor. Vicente por su parte habia acarreado consigo una gran cantidad de nubes y sus ojos botaban ese humo ya caracteristico de el, esperaban la señal del comienzo. Una explosion unas 10 cuadras de donde se encontraban indicaba la accion de los acracios ante un puesto de avanzada corporativo. Para Ptrov y Vicente fue la señal.
-Moriras- dijo Petrov- Moriras y te iras conmigo al Abismo.
-Y tu volveras a la luz conmigo despues de mi resurrecion bastardo.
La dimension en la que se hallaban fue distorcionada por la combinacion de enrgias contrapuestas, el cielo se veia amarillo, los pisos de color azul violeta, las caras negras y los incontables poderes se tornaban multicolores al estrellarse mutuamente. Explosiones constantes indicaban la equivalencia de sus fuerzas, ventanas y pajaros volaban al oirse las ondas sonoras. Una milesima de segundo basto para hacer caer a Vicente en una trampa casi mortal: borrar los recuerdos.
-No recordaras a quien amas, Vicente-dijo alegremente Ivanovich, mientras imagenes constantes de sombras aparecian rodeando a Vicente quien tomaba su cabeza a dos manos sin poder soportar el dolor que eso le provocaba- Ahora mi pequeño amigo luminoso, se acabo el juego...
Petrov volo lejos despues del golpe recibido con una cantidad de energia considerable para ese cuerpito de niña: Anita llegaba a tiempo.
-Toma, Vicente- le dijo mientras le pasaba su sombrero al postrado que se intentaba levantar- ¿Estas bien?
-Si, pequeña, un segundo mas y ya no recordaria a quien me enfrentaba, muchas gracias.
-Eric te necesita, vamos
-Esta bien, ahora debemos permanecer unidos todos.
Pocos segundos mas tarde Metales y piel se volvian a encontrar en el centro de la ciudad. Pero no todo salia como Lazaro lo habia previsto. No sabia de la existencia del nuevo caballero oscuro en las lineas de los Abismales, Aztaroth hacia de las suyas con los pobres cyborgs y soldados corporativos. Lazaro resignado solo sabia una cosa mas, la musica haria algo de bien en estas circuntancias, debia llamar a Roy y a Dj Slap.
Avatar solo seguia enviando mas y mas corporativos a la zona cero del encuentro abismal. Al momento llegaba el informe del nuevo proyecto: Tarika y el Comando. Por ahora la magnanima figura de un niño conectado a su computador parecia tranquila. |