Podria decir que soy un heroe, mas sin embargo de mi solo quedan sombras lagrimosas de aquellos viejos recuerdos tormentosos y tristes, una envenenada soledad retrae mis mas fuertes ambiciones contra lo cual me resta luchar batallas autodestructivas recordandome lo debil y patetico que solia ser. De mis fuertes acciones nacio el deseo de reconstruir mi conciencia, una conciencia ensangrentada, aferrada al corazon de cada ser que beso mis pies. Soy el mas grande, el mas poderoso, y a la vez soy el mas inmundo humano jamas concebido por ninguna madre, mis decisiones cambiaron el mundo.

Durante esos atardeceres que parecen durar 100 años fue que me di cuenta cuan solo estaba al ver que mi propia sombra se avergonzaba de estar atada a lo que yo consideraba una gran existencia. Acudi a mi reflejo y solo encontre tristeza, recurria a todos mis buenos recuerdos... pero ya habian sido deteriorados por tantas lagrimas invisibles, y cuando busque compañia descubri que el mundo habia sido convertido en una maraña de esclavos dedicados exclusivamente al manoseo y la reproduccion... un mundo dominado por balas y sexo... un cataclismo cosmico exploto en mi... habia fracasado en una mision sencilla.

Mis cadavericos ojos se hundian mas y mas en una agonia combustible... y fue cuando encendi la chispa que ilumino ese ser malvado que todos incubamos dentro. Sus ojos rojos simbolizaban la espada recien forjada que empuñaria para sacrificar esta existencia injustificada. Tan solo quisiera no haber soltado tan terrible depresion... pero ya era tarde, de lo que fui solo quedaban sombras lagrimosas de aquellos viejos recuerdos tormentosos y tristes. Siempre quise alejarme de la soledad... pero esa ecuacion daba como resultado muchos muertos... conclui que mientras mas vidas cortaba, mas dificil era el cortar la vanidad que producia el revolcarce en sangre ajena.