Afuera una señora gritó –despégate-, hace un tiempo alguien salto al vació rompiendo todas las dependencias que quisieron atarlo a un momento de la historia, y escapo. Luego de eso un editor de diario se pregunto por que esta noticia no lograba la importancia necesaria para ser la cara de la portada un día martes.
Un señor se columpia en un trillón de viajes espaciales sin levantarse de su silla de empaquetador de serpentinas, toda su vida deseo tener una culebra en casa.
Hay una pregunta flotando en el universo que nadie decide adoptar como propia y se aleja de todas las galaxias en atracción a la nada, único camino que no encontrara el servicio sanitario en sus infinitos labores de higiene y estética.
Alguien recordó a su madre mientras se atascaba la peineta entre sus negros cabellos que nunca quiso tener. Alguien entra a través de la puerta de su habitación y le pregunta si es necesario gritar de esa manera. Tres años antes esa persona perdió una pierna cuando lo mordió un perro al comenzar la primavera.