¿Y el viento salado?
¿De qué mierda sirve entonces el rose entre la piel y la sangre?;
no perpetuos son los momentos de sexo insulso y el arena se mete en los lagrimales,
ya no puedo llorar más y me ahogo con el dolor,
Con la ira,
Con la rabia y con la locura;
Con los sudorosos movimientos de tus caderas y esa mirada tan frívola que causa nubarrones en mi piel.

El sexo de ayer fue una mierda. Cagada como siempre; como si estuviera follando a un muerto. Si vas a salir con esas chingaderas mejor te mato y la fantasía se vuelve realidad. Yo no se porque insistes, yo no se que buscas; ni siquiera se porque me haces caso o porque haces el esfuerzo de dejarte penetrar. ¡No mames! Hasta por el culo me dejaste cogerte, y mira que no es porque no lo haya disfrutado, simplemente no alcanzo a visualizar la razón emocional que te llevo a decidir algo como eso. Ni si quiera me llamaba la atención, te pusiste como loca y solo te lo metiste, ni preguntaste…Como tantas veces: Te valió madres…

¿Y la razón?
No se dónde la dejamos, no se donde la perdimos o si simplemente la abandonamos. No se ni siquiera porque te contesto cuando me hablas,
Pero la asfixia es tan excitante,
Tan atropelladora que arrasa como el trueno;
Si, cada vez que sonríes, una ciudad se desmorona entre calamidades que llevan tu nombre,
Tú esencia,
Y tú podrido aroma a sexo. Si, soy hombre carajo, pero eso no significa que te quiera follar nada más, para todo caso me pago a una puta de verdad. No como tú, que pretendes, que actúas y falseas tu papel como si desde que naciste implícito existiera en esa carne de olor fétido que llevas por vida.

Por cierto, me debes dinero.