Hoy decidi continuar con mi vida, se que suena trillado y hasta exagerado. Pero es que cupido no siempre acierta, y por alguna extraña razon, ese
pequeño niño desnudo -- que hasta vuela -- se las arreglo para que me acercara a ti. Quizas en otra vida todo hubiera sido diferente, miles de atardeceres nos hubieran abrazado, y el mundo no hubiera sido mayor obstaculo. Pero ahora, en este momento, y en este estado de pseudo-decepción, te pido y te ruego que no me llames, que no me busques, que mi nombre se desvanezca lentamente de tus pensamientos, hasta que un día te olvides de que yo alguna vez existi. No me dolera no verte sino saber que pude haberte visto cada dia de mi vida, y no me destruira el hecho de que jamas podre besarte, sino saber que pudimos habernos besado hasta perdernos el uno en el otro. No te deseo lo mejor, porque eso siempre dependio de ti, y solo me queda por decirte que tratare de vivir cada día mejor que tu, y no es por ser egoísta, aunque se que lo soy, pero en verdad quiero que te lamentes, y que un día, cuando de seguro tengas unos cuantos años sobre tu hombro, escuches que soy feliz, y que entonces mires a ese cielo que tanto negaste y te arrepientas. Así que cupido, la proxima vez que se te ocurra entrar en mi mundo, piensalo dos veces, guarda tus alas, y sobretodo, guarda tus flechas. No tienes tan buena puntería como crees.