Se aclara el cielo más negro, se disipan las tempestades, miro la vida con los colores que en mi lienzo tu escoges, diriges a tu antojo mi mundo interior, porque sin darme cuenta te pertenezco tanto que ya no soy dueña de mi, sino que existo para ti. La sensación que significa tu amor a mi existencia no tiene comparación, las veces en que me recoges suavemente con tu ternura y te olvidas de quién eres para dar espacio a lo que juntos somos me estremecen el corazón, es poder tocar el tiempo, sentir la textura de lo infinito con la yema de los dedos, hacer del amor algo nuevo, algo solo nuestro.
En ti descubro magia cada día, basta mirarte para saber que estas en mí, como yo anhelo estar en ti.
Me haces falta, y al hacerme falta descubro que me haces bien, que no existe un sustituto a tu presencia, que las horas se me van de prisa cuando te tengo conmigo, y que la distancia desaparece si en tus ansias y en las mías descansa un Te Amo. Me haces bien, como me hace bien creer en Dios, en la naturaleza y su equilibrio, en la verdad y la justicia, en la inmensidad de la fé, en lo sublime del amor.
Como un milagro te apoderas de mi voz, de mis cinco sentidos, de mi música interna y las melodías que compuse, de las cuerdas de mi guitarra, de mis letras y mis reflexiones, estás en todas partes aunque no estés, atravesando mi piel y mi vulnerable existir te apoderas de mi ser, conquistando cualquier miedo o inseguridad. Atrás queda pena y olvido si me ayudas a saltar la emoción, la duda, la desesperanza, enfrentándome a mil demonios que solo existen en mi destino para ser derribados por la fuerza que me da tu amor.
Las razones de mi amor por ti no las tengo, no soy amiga del sentido por estos días, pero sé que el corazón no entiende de razones, no acepta explicación, es un lenguaje primitivo darle sentido al sentir, es un reduccionismo insolente tan solo intentarlo, el corazón solo entiende de sentimientos, la abstracción más pura que poseemos como mortales.
Me haces bien, no hay discusión… y lo más parecido a la muerte es no tenerte.
Cuando tu no estás me falta el aire para respirar, se me vuelve todo oscuridad, es una agonía tratar de estar sin tu querer, como un pez se ahoga en la superficie, me ahoga no tener tus besos, tu presencia junto a mi, me mata lentamente tu ausencia. La fantasía de muerte ronda por mi almohada cada vez que desapareces de mis noches, y solo me queda extrañarte y aferrarme a tu recuerdo.
Hoy me siento viva, recorro mi camino y ya no me preocupa que el sentimiento le gane a la razón, me haces bien y solo puedo desearte, me haces bien y solo quisiera que estés conmigo, me haces bien y te descubro en mis espacios. Me deshago de las antiguas barreras, me sacudo la tristeza de encima porque estas tú ahora, porque hay un horizonte lejano que alcanzar y me esfuerzo por ir tras mis sueños… mis sueños que son tuyos, sin egoísmos, sin vacíos, solos tú y yo y un cielo infinito.
(CAST)
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