Ámbito cenagal y sombrío....
Bruma flotando en el vacío....
Lianas, ramas, troncos retorciéndose....
Toma mi mano, no me sueltes....
Sígueme, no dejes de avanzar....
Bajo el denso resplandor lunar,
Sombras fugaces nos persiguen....
Sigue corriendo.... sigue, sigue....
La luz se desvanece a lo lejos....
Todo es profundamente negro....

Despierta del sueño....
Se acabó el tormento....
Su cuerpo es pequeño....
Intenso es su aliento....
Y en un brusco estremecimiento....
Ves retorciéndose su cuerpo
A cada movimiento....

Tu voz es un templo en mi memoria....
Tu voz me habla de ídolos paganos....
Te aproximas, etérea, ilusoria,
Alzando lentamente las manos....
La más bella de todas las estatuas,
Seduciéndome con una mirada
Fría y silenciosa como la muerte....
Háblame siempre.... háblame siempre....

Jadeo agobiante, posesivo....
Pulso efervescente, opresivo....
Te alejas, te alejas de mi vista....
Me hundo dentro de mis pupilas....
Cada grito tuyo me estremece
Y en mi cabeza permanece....
Confía en mí.... no temas.... no temas....
El amanecer aun no llega....
Oh! nunca te apartes de mi lado....
Pero ya no escuchas mi llamado....

Despierta del sueño....
Se acabó el tormento....
Su cuerpo es pequeño....
Intenso es su aliento....
Y en un brusco estremecimiento....
Ves retorciéndose su cuerpo
A cada movimiento....

Callas.... mis ojos al fin se cierran....
La realidad que veo se quiebra....
Tus manos, a las mías se aferran
Con una desesperante angustia....
Callas.... comprendes que ya no hay búsqueda....
La noche se oculta con la luna....
Tú te ocultas dentro de mi mente....
Háblame siempre.... háblame siempre....