“Salí de mi casa como es natural, un día viernes en la noche caminando en las afueras de mi hogar, realicé un camino un poco agotador para las personas que no gustan de caminatas que impliquen esfuerzo físico, y me sorprendió un olor muy agradable, el cual recorrí con mi olfato, para buscar el destino de tan delicado aroma, para mi sorpresa recogí un papel arrugado en el suelo el cual estaba muy bien aromatizado y decía lo siguiente:

Hola como estas, espero que me perdones, lo hago solo por agradarte, no me imagine que te importara tanto, pasan estos días y te he extraño tanto que me parece una eternidad no haberte visto, te escribo porque es la última vez que te veo y me parece más conveniente que leas un poco estas líneas antes de rasgar el papel, el cual es el mejor y merece tu total atención, fíjate que compré el más caro que pude conseguir, y consideré que aún este papel no merecía tus preciosas manos así que lo sumergí ante las mejores fragancias que reuní en el mercado solo para agradar tu precioso olfato, espero que te sientas a gusto porque eres lo más importante que quiero, y espero que algún día me perdones por esto............, traté de leer más pero estaba algo borroso, al cabo de un momento escuche un ruido......., era él, quién se me abalanzaba y me insertaba un hacha en mi cráneo, antes de morir observe la sombra de alguien que agarraba la nota arrugada, y emprendía la huida...........”