-Es de noche y quiero leer a Nietzsche, pero no me concentro.
-Es de noche y quiero oír su voz un segundo.
-Es de noche y vengo llegando algo cansado.
-Es de noche y no veo nada cuando me asomo por la ventana.
-Es de noche y tomo Coca-Cola diet.
-Es de noche y escucho reventar el gas de la coca diet en el vaso.
-Es de noche y eso de “coca diet” me parece ochentero y medio cursi.
-Es de noche y no tengo sueño, por eso escribo…
-Es de noche y quisiera soñar con ella.
-Es de noche y pronto se acabara.
-Es de noche y de la nada salieron unos versos.
-Es de noche y me importa un pico que hallan salido unos versos
-Es de noche y no quedaron mal los versos, que más parecen unas frases al aire.
-Es de noche y si alguna vez se publicó estas líneas me acodare de esta noche, en que el chino Rios perdía con Zabaleta, había festival en Viña, el Presidente estaba en Europa y unos senadores en Cuba, Colombia bombardeaba terroristas de la FARC y en la Haya, Milosvic es juzgado. Hace exactamente 11 noches que no la veo y espero que sean menos los atardeceres cuando mis labios vuelvan a tocar sus labios.
-Es de noche y pienso: Si un indígena se viste de seda, deja sus lanzas, las cambia por armas, comienza a traficar. Es sólo una opción. Somos el continente de las teleseries y las dictaduras sangrientas. Guerras de pueblos huérfanos hay cerca, descendemos del mismo padre lo que es incoherencia. Más bien se baraja el complejo de Edipo de un progenitor ladrón y abusivo.
-Es de noche y me puse socialista, antiglobalización y toda esa locura que no viene al caso a esta hora.
-Es de noche y nadie va a cambiar el mundo.
-Es de noche y no voy a anotar esta fecha.
-Es de noche y una pregunta: ¿que será de mí en 1, 5, 10 años?
-Es de noche y espero respuestas…