Siento como la nube de humo se aleja de vez en cuando y las muchas veces que entra en mi nariz al saber que estoy viva, todas las malditas mañanas de mi vida, como si fuera un despertador que programaran para levantar a todos y saludar monótonamente a su alrededor, que no son más que pedazos de recuerdos reunidos en rincones dispersos-ocultos y llevos de polvo-olvido.
Blanca frescura, relajante madera, que de piso en piso se queja, de lamentos talvés, al saber que su ignorancia o falta de información hizo que terminara ahí, tirada en el suelo, tirada al olvido...
Siento como las pequeñas voces sigilosas, como para no molestar, susurran los oídos dormidos que sueñan con tiempos mejores, con metas de esperanza y hacen que se arropen y emprendan su viaje,
muchas veces eterno y con consecuencias graves, desgastándose con cada neurona que manda alguna señal de vida...
Observo como pasa una eternidad frente a mí, como si corriera a la velocidad de la luz de una vela,, y sólo dejara un recuerdo más en la memoria atorada y al mismo tiempo vacía de información innecesaria de vastos recuerdos, de leves probemas...
Veo como el egoísmo y envidia inunda las caras de aquellos atrevidos, que lanzan y no piensan en su conciencia dormida y cegada con la mentira de la superficialidad...duele oler el sonido de hablar mal de alguien y que inocente éste escuche las voces atoradas de tanta maldad...
Termina el viaje interminable, de suscesos extraños y cansancio acumulado...