Johnny Dexter Cono, duerme enrollado en una hoja de eucaliptus victoriana del siglo pasado.
En el recinto de piedra duerme su hermosa hermana Cuchara que llueve en mermelada, su parlamento es un distinguido color dinosaurio, y no le teme a las sequías de verano ni al trigo. En el patio trasero está el perro con cabeza de perro y cuerpo de perro, sin olvidar su cola de perro, que lo hace más perruno e inoportuno a la hora de comer comida de perro. Finalmente sus padres cabeza de manteca contrólan el comercio del sur por posibles averías en el equipaje.
La familia era seca pero no deseaba agua, pues el mayordomo era tupido de las incoherencias.
Una mañana del solsticio de verano aconteció que Johnny no era el mismo. El sol golpeaba la puerta para abstraerle las pertenecías y establecer un lazo con la realidad, pero enseguida johnny oyó su respiración detenerse en el silencio de la habitación.
La historia termino muy pronto cuando Cuchara irrumpió en la caja silenciosa con las noticias de que el cielo había caído y además para alegría de Johnny, traía el desayuno.