...para Manuel, muerto de pena a los veinticinco.


No sé si han escuchado esta canción que se llama Paloma. Es de Andrés Calamaro y empieza diciendo algo de irse a volar de a dos con un solo paracaídas... Ah! Olvídenlo. No ayuda mucho si ya la escucharon porque todavía no la han escuchado cantada por mi amigo Manuel. Hasta ahora eso ha sido regalo mio y de otros pocos que estuvieron cerca en aquellos dias en que él andaba en el difícil oficio de vomitar corazones. En realidad Manuel es un tipo genial y la cantaría encantado para ustedes. Aún si no los conoce. Lamentablemente ahora va a ser un poco difícil que pase eso ¿saben? Es 8 de diciembre y me acaban de decir que ha muerto.

Cuando lo conocí, ya tenía un par de balas alojadas en el pecho pero no era para preocuparse. Ahora me pregunto con rabia por qué nunca conversamos de ello. Me sentaba a su costado y él cogía mi guitarra y se ponia a tocar Paloma. Bueno... tal vez Crímenes Perfectos, Resumen de Noticias o si se le antojaba De la ausencia y de ti que fue la que me cantó cuando salí del país. Cantaba miles de canciones pero escuchando el LA menor de Paloma fue que me di cuenta que él también había sido afinado para vivir dos veces por día.

Por las noches gritaba y bebía como un loco o tal vez un poco más y entonces nadie hubiese dejado de jurar que Manuel era un perfecto RE mayor. Juntos se nos hacía casi imposible estar deprimidos, es cierto, pero que no los engañe la risa que eso es solo el arcoiris de lluvias pasadas. La verdad al fin y al cabo es que su corazón estaba hecho de dos soldaditos tristes enfrentándose a uno alegre. Las matemáticas dicen que este último casi siempre perdía la batalla.

Váyase a la mierda señor cura que yo no estoy diciendo esto con pena. Pena de ustedes que no lloran! Pena de ustedes que no gritan ni se les llenan los dedos y la garganta de marcas. Pena de mi que no me enamoro en cada esquina! Pena de nosotros que vivimos esperando y no jugando. Oye Manuel! Apuesto que a ti también te hubiese gustado despertar temprano un día para ir por la bajada Balta caminando entre la neblina limeña hasta el mar. Siempre falta tiempo lo sé. Ahora lo que me van a faltar son cuentos para convencer al mundo de que la fiebre de tu virus se le ha curado.

Cabrón... te tirabas del último piso del edificio y todos te seguiamos el ejemplo felices. Nos sacábamos la mierda claro.. pero cómo aprendíamos con esas caídas y cómo chupábamos después recordándolas y prometiéndonos más. Transformaste nuestro pan de cada día en cerveza y creo que hasta a Dios le pareció bien porque al rato se nos unía. Me pidió que te dijera que le caías muy bien. Me olvidé.

Estar confundido era tu única certeza y eso tuve que cogerlo como modus vivendi para mi porque descubri que así la vida se había enamorado perdidamente de ti. Vamos a volar - decíamos.. y los grandes nos amenazaban.. - No sean idiotas! se van morir.. pero que chucha.. igual nos íbamos porque le creíamos más a las canciones.

Te enamorabas de la venus de Boticelli, luego de Media Verónica y después de alguna chica de la universidad tan linda como las dos primeras. Venias corriendo a contármelo. Yo me iba feliz convencido de que ellas se iban a bajar de su cuadro, canción o clase sólo para darse un paseo contigo. Tú no te lo creías tan fácil y te ibas a incendiar el mundo.

Ahora, echado en mi cama con la noticia de tu muerte goteándome desde el cielo me pregunto... qué casa estarás dejando sin hijos, qué esposa sin sonrisa, qué guitarra sin llanto. Comprenderás que es difícil no mandarte rotúndamente al carajo. Fernando y yo ya habíamos planeado todo para de aquí a unos años. Un viaje con los hijos y ellas tres que iban a ser igual de borrachas y sonrientes que nosotros.

De momento todos estamos un poco presas del pánico pues es diciembre y has muerto de pena a tus veinticinco. Yo no sabía que se podía.. pensé que eso sólo le pasaba a los pajaritos, pero ya ves.. se aprende algo nuevo cada día. ¿ O será que eras pájaro?

Ahora párate de una vez de esa tumba por Dios que me da escalofríos. Ya lloré bastante por hoy. Párate te digo que eres el maldito ave fenix renaciendo mas bello de sus cenizas. Ponte de pie y dime que vas conmigo a la bajada Balta de mañana. Mira como está llorando ella que te espera en la próxima esquina! Mira como estoy llorando yo! Abre los ojos para que lluevan nuevamente de alegría. Toma mi guitarra, anda, toca algo Manuel, Mira! te presento a mi novia! Ves que si existen! mira esta nueva canción! Vamos a sacar los acordes para tocarla! Recítame de nuevo el Credo de Mario para acordarnos que no hay que creer en generales ni en las nalgas de miss universo. Anda hermano, ya déjate de cosas y abre los ojos que me estoy desesperando.. dame un abrazo que hace tiempo que nunca. Anda Manuel. Cántanos Paloma que ya todos están sentados mirandote encantados. Vamos Manuel. Respira. Palpita. Parpadea. Brilla! Anda.