Este cuento que te cuento
es un cuento un poco raro,
pues no cuenta de princesas
ni cuenta del brujo malo.

Se trata de una niñita
que Franchesca se llamaba,
y levantarse de la cama
¡siempre tanto le costaba!!

Se trata de una mamá
que no sabia que inventar
para lograr que Francesca
se pudiera levantar.

Una vez se le ocurrió
mostrarle el día de sol
y cuando la ventana abrió
el cuarto se iluminó.

Pero esto a Francesca
no es que mucho le gustó
y con un refunfuñón
se dio vuelta y se durmió.

Otro día muy temprano
una canción le cantó
y Franchesca con sus manos
las orejas se tapó.

-¿Probaste con un silbido?
Le dijo papá a mamá.
-Sí probé, pero la niña
no dejaba de llorar.



Una mañana de invierno
intentaron con su hermano
darle un fuerte, fuerte abrazo
y cosquillas en los brazos.

Si bien Franchesca rió
y el abrazo le gustó,
no quiso dejar la cama.
¡Bajo las sabanas se metió!

¿Qué hacer? la mamá pensaba,
para lograr que Francesca
contenta se despertara.

De repente se le ocurrió
¡Una idea re-genial!!!,
Despacito se acercó
y una historia le contó.

Franchesca la escuchó,
sus ojitos abrió
y una sonrisa muy grande
su carita iluminó.

¡De un salto se levantó!
Un beso a mamá le dio
y desde ese hermoso día
siempre contenta despertó.