Oriad se encontraba sentado en su habitacion.Era reducida pues vivia el solo hace ya bastante tiempo, y ademas no era un potentado en terminos economicos.Siempre pensaba que su peculiar nombre traia consigo toda un vestigio de su cultura o era simplemente creacion de una persona de gran imaginacion, aun para él esto era desconcido pues sus padres lo habian abandonado sin dejar ningun rastro que pudiese ayudarlo a comprender mas de su origen. Decidio continuar adoptando este nombre porque lo veia original, y de gran utilidad ya que nunca seria confundido con nadie mas, ademas de la tramitologia que esto representaria. En fin Oriad era un hombre comun fuera de su nombre, era del monton, empleado de una firma de optimizacion de procesos por medio de metodos matematicos. Su vida nunca habia ido muy emocionante, mas bien rutinaria. Tenia bastante tiempo libre pero nunca sabia realmente como usarlo para sacarle el mayor provecho, la mayoria de este lo usaba pensando en matematicas ese mundo tan apasionante para el y que ahora representaba el pan de cada dia. Siempre habia pensado que las ciencia era una extraordinaria forma de ver el mundo pues representaba el uso mas elevado de raciocinio. Admiraba la ciencia del logos, la logica, pensaba era la forma en que se desprendia el saber. Oriad siempre habia tenido esa idea fija que siempre retumbaba en su interior, "El poder se deriva de saber como funcionan las cosas, y tener la capacidad para usarlo y modficiarlas a como uno desea". Este dia andaba especialmente pensativo, acababa de salir de su trabajo y ahora descanzaba en su habitacion como siempre lo hacia, sentado en aquella vieja silla de la esquina. Oriad nunca realmente habia tenido muchas mujeres en su vida pero siempre se le venia a la cabeza que tal vez darse una oprtunidad con alguna lo haria mas feliz. y ahi en la vieja silla depronto colisionario estas dos ideas que siempre habia tenido por separado, la ciencia del Logos y la posibilidad de un amor, de una mujer que lo hiciera feliz. Con un derrame de ideas repetino, y tras una exaltacion, comprendio lo extraordinario que resultaba lo que le acababa de ocurrir. "Como no lo habia pensado antes"-se decia. Todo tomaba sentido, debia entender como funcionaban las relaciones, mas aun las mujeres pero de una forma cientifica con experimentos, con prueba y error. Una vez teniendo el saber "podria tener la capacidad para usarlo y modficarlo como el deseara".


"Sera posible que la la mujer sea descrita por algo asi como una funcion exponencial que a la menor fluctuacion se obtiene como resultado una salida con tendecia al infinito , definicion de inestabilidad?, es la mujer funcion del tiempo y el dinero?" pensaba riendo.
(Continua)