Nacer nos hace libres de pensamiento y elección (o eso es lo que nos han hecho creer), si no fuera...
si no fuera porque nacemos en mitad de una cultura especifica
si no fuera porque nos doblegan con una educación aleatoria
si no fuera porque tal vez, allá donde naciste, no hay comida
si no fuera porque allá donde naciste, hay miseria y guerra
No elegimos nacer, ni tampoco podemos elegir como vivir, los condicionantes son gigantes, no molinos.
¿Y si todos los padres valorasen esto que cuento? Sería posible por un momento entender que para nuestros hijos el hecho de pensar o elegir por si mismos es un privilegio casi imposible de disfrutar...
Supongo que es mejor resignarse o al menos eso es lo que veo en nuestra mediocre sociedad occidental.
Y todavía critican a “las esperanzas” montadas en patera, o a los padres que intentan superar la mala educación que recibieron, o el sentido crítico que mantenemos algunos cuando desaparece la tolerancia y la honradez
Nosotros idiotas, seudo primates altivos incapaces de admitir lo que nos incomoda, hemos convertido el vivir, en una cárcel, de la que intentamos huir, huir comprando, huir soñando, huir gozando, huir matando, huir aprendiendo y en esta huida suerte tendremos si al menos por un instante, podemos sentirnos como carcoma en el piano del mas virtuoso pianista, vibrar nos ayuda a entender la vida.
No aprendemos de las lágrimas, ni de los textos sabios, no aprendemos del dolor que provoca el odio ni de nuestro rico entorno.
Y a la muerte ningún miedo, quizá sea entonces cuando seamos libres verdaderamente.
De aquí a ese día busca en tu alma de primate seudo inteligente como regalar mas amor a tus hijos y al entorno que te envuelve.
Este año celebré mi primer día del padre.
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