Oh! el cuello del señor
La serpiente mordió!
Que será de nosotros, caeremos en el olvido...
Que importa ya, todo lo hemos perdido.

No os pongáis tan triste, que no era tan buen erudito.
Ha trabajar las manos y la mente
Que como animales os tenia el viejo vehemente
Y os ha dejado sin pastorcito

El que se regodea en si mismo tiene razón
No hagáis de su muerte un tragedia sin razón
Siguéis coleando y sea pleno el cielo sobre el trigo
la memoria de la luna no tiene olvido
que os alimentará a vosotros y al olivo
de su fina luz parda, junto con la serenata,
la nocturna y la alborada vestidas elegantes ellas
de lúgubres esferas.

en su tumba ahora yace el antiguo maese
es ahora cuando siento que todo esta vivo
y a mi alma nada malo acaece.

vosotros sin dios y que viva la razón!
Yo sin odio ni afección y feliz sin dolor
Ya no raspo mi vientre y río con fervor.
No será de carne tampoco de sangre
Nos ha traído pan y también el vino
Revuélcate ahora, viejo pedante.
El cielo no te pertenece tampoco el olimpo.

Oh, oh oh bailad que se alejó la tempestad...
en derredor de mi las brujas volarán
vistiendo de gala ironía y felicidad
que traigan al licenciado pata de cabra
traigan también al navegante del arca
que en el sarcasmo el atraca.

oh oh oh bailad y cantad
no temáis a la oscuridad mucho menos a la grata soledad
que os da licencia de matar
al hastió y a la falsedad
escupan pues la cruz y a la santa trinidad
que no quede esto en divina impunidad.

Oh oh Bailad bailad, que junto a su engendro
el maese castigador yace ya.