6:35 a.m. Suena una música, creo que son los Led Zeppelín, aunque sé que luego no lo recordaré. 6:40 a.m. Pongo un pié en el mundo, voy caminando como un zombie, me guío por mi destino. Prendo el califont, de vuelta al baño, largo el agua, ahora voy a la cocina. Aún está oscuro, creo que está lloviendo. Doy el califont. De vuelta al baño. Me desnudo. Sí, está lloviendo, siento cómo caen las gotas en el tragaluz. Abro la cortina de la ducha. Me sumerjo en la lluvia artificial y me siento vivo, como si fuera la primera vez. Me apoyo en la pared. Dormito con el agua corriendo por mis largos cabellos (¿me lavo el pelo o no?). se me hace tarde. 7:10 a.m. Me estoy secando y observo mi demacrado rostro en el espejo. Me apesto. Corro hacia mi pieza. Pongo música lo más despacio que puedo. Ayer quedó el de Queen. Suena “Big Spender”. Me visto. Los zapatos igual de sucios que desde siempre. 7:20 a.m. Me dirijo a la cocina. Abro el refri. Nada. Podría hacerme desayuno pero me da lata, además que se me hace tarde. 7:30 a.m. Abro la puerta de mi casa. Salgo. 7:32 a.m. Mientras espero colectivo trato de acordarme con qué canción me desperté, pero es inútil, no lo recuerdo.