Dos lágrimas se deslizan.
Se secan antes de llegar al corazón,
Se clavan en el alma y,
Ésta, llama y reclama su poder.
La herida aún se resiente
Y ve la fe danzar ante sus ojos
Nublados, lluviosos, mojados.
No hay refugio para el dolor
Y se moja de compasión.
Tormenta de sentimientos,
Mi espíritu se tambalea,
La esperanza queda lejos
¿Queda? No hay,
Se desvanece... y muero.
Espero
Y lucho contra un imposible,
El destino me ayuda a creer mi engaño
Y el amor me camela
Y me seduce
Y me canta canciones, a veces,
Susurrándome al oído.
No confío,
Dudo, me lamento, grito,
Me miento y río.
No sólo a mí.
Dejo de buscar,
Ya me encontrarán.
Sufro,
Nadie imagina
Lo grande que es mi pena.
Me entrego,
Me destrozan.
¿Vivo? No puedo,
Lo intento...
¡¡¡Maldito amor!!!
Extraído del libro "Bajo la Piel del Alma" de Víctor Morata Cortado
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