Texto realizado para la hermandad de canis_lupus

Dedicado al Reino Animal, en comunión con todos los Reinos Naturales, con Amor Absoluto.


Dame tu mano
sonríe, y hazme florear
en el verano.


SOY PARTÍCULA QUE SUEÑA

Saboreo los susurros de las plantas, los poemas de las aguas y los cantos de las aves; saludo al lobo gris, cuando extraña la concordia y se introduce en mi conciencia para que lo oiga desde mis cromosomas; me deleito con los rumores de las estrellas y el discurso de la luna, al ver que mi silueta traspasa las cordilleras:

--Allí va, no está en su pleno juicio, pero su musa nos mantiene en vida… ¿Qué sería del cielo si ese chiflado dejara de delirar? las estrellas y la luna pasaríamos a ser simples estudios de astronomía y dejaríamos de vibrar como símbolos de la lírica. Entonces, la existencia se volvería grisácea, pues las metáforas se alejarían y con ellas los sueños de colores.

He vivido la primavera de mi vida y de los campos. He notado volverse mis cabellos canos observando un camino misterioso que me llena de paz; y me he admirado al ver en las plantas tostarse sus hojas que luego se desparraman y se transforman en residuos orgánicos. También he logrado estremecerme, al observar la escarcha que cubre la pradera. Sin embargo, yo sigo soñando, sin remedio, sin curas, saboreando los olores y acariciando las sonrisas… porque es delicioso ser sonámbulo y desdoblarse para volar en lo alto y divisar los niños que juegan mientras los amantes se besan. A mi lado, de repente está ese satélite que me acompaña a mirar la hermosa panorámica de la tierra… Asia, América, Oceanía… Europa… sí voy a caer en Europa… España tal vez… ¡Galicia! Me encanta la historia de Galicia... Me fascina la geografía del mundo y lo inescrutable del universo, del sin tiempo y del sinfín.

Es eterno el florecimiento de la vida que se desprende del ropaje vano, así se hace también eterna la frescura de los labrantíos y las almas. Soy una partícula más que integra el todo, puedo sentirme libre a la par de mis hermanos, que alumbran con sus ojos el luto de la noche y aúllan afirmando su esencia. He hurgado tantas veces en miserables cuerpos a través de los siglos, que mi hogar es la eternidad. Por eso, lobos, aves, estrellas, luna y granos acompáñenme a disfrutar de lo verdadero que nunca será invisible al Amor Absoluto; sigan murmurando sobre mis sueños, que les dan la vida y no me dejan morir.

Mila



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