Un día soleado, con mucha vida amaneció.
Y yo pensando que esa noche podría verte, sentirte y tenerte…
Fueron pasando las horas y yo esperando ansiosa
Espere y espere…
El sol empezó a desaparecer para dejar lugar a una bella y enorme luna con brillantes estrellas
Eso minutos fueron eternos,
Nerviosa e ilusionada me arregle para vos…
mi cabeza giraba y giraba para todos lados
Esperando verte venir hacia a mi
Que ilusa, como pensar que tu aparecerías, estando tan lejos
Pero una parte de mi no se quiso resignar
Sonó el teléfono y corrí
Esperando escuchar tu vos
Pero no, era una vos más suave que ni siquiera registre que pretendía
Otra vez me senté a esperarte en mi vereda…
Y las horas pasaron…
El sol volvió a aparecer
Y tu no estabas…
Me resigne y me fui a mi cama a conciliar el sueño…
Lo último que me acuerdo es tu cara con una sonrisa
Diciéndome “te amo”

A la mañana siguiente me desperté con la ilusión de verte
Pero mi cama estaba vacía…
Y sin rastros de que tú hubiese venido

Cuantas noches mas serán como la noche
Cuantas veces más tendré que esperarte…
Cuantas mañanas mas mi cama estará vacía