Jugábamos…era lo único que hacíamos. Sólo un cuarto del pastel de cumpleaños yacía en el plato, Norah se sentó en la mesa abrió las piernas y puso el plato entre sus piernas. Hacíamos fila para que ella nos diera pastel en la boca. Hasta ese punto no me había dado cuenta de lo borrachos que andábamos.

Pasamos por la báscula casi todos, Norah de algunos lamía el merengue de sus caras, lengua… merengue…Norah… Isaac su novio de pie a su lado supervisando cada uno de los movimientos de su mujercita. Emilio recibió un pedazo de pastel de los dedos de Norah…ella lo tomó por el cuello y lo acercó hacia ella…sobre el hombro me miró para estar segura que la vería… lo besó en los labios, Emilio ni se movió…cuando se vio libre tomó más pastel de entre las piernas de Norah y se lo dio en la boca…

Era demasiado para Isaac que en un impulso la acercó hacia él…la lamía y besaba al mismo tiempo. Sin saber muy bien qué hacer les dije: -¡Hey yo también quiero…! Isaac marcaba bien su territorio Norah era suya, Emilio y yo presenciábamos aquella demostración de amor…nos miramos sin hablar… nos dábamos pastel en la boca.

Isaac separó a Norah y la acercó a nosotros…ofreciéndonosla… Emilio y yo la besábamos… la lamíamos…buscaba con desesperación su boca, su lengua era dulce…sus labios eran dulces…podía distinguir la boca de ella y la boca de Emilio…los labios de él eran suaves casi como los de ella…la mirada a medias de Isaac. Alguien gritó por ahí: ¡Féliz Cumpleaños pinche Isaac!