A veces siento que la ansiedad me esta matando,
y la desolación poco a poco me va debilitando,
la vida trata de matarme con flecha y espada,
trata de cegarme con belleza profanada.

La mirada penetradora de una amiga perdida por mi arrogancia,
es una,
aquella que de sus cabellos despide una gran fragancia,
pero apesar de esogrita con su mirada un resentimiento con gran elegancia,
que me lo gane con el esfuerzo de una gran mal andanza.

Mi corazon me dicta, que me arrodille ante ti suplicando perdón,
pero mi orgullo no deja de dictar tal sentencia a mi corazon,
estos dias el delirio ha sido mi espada para luchar contra mi razón,
y por escudo he tenido, tu saludo perdido en esta mi ilusión.

Yo sé que en estos momentos tienes cosas mejores en que pensar,
se esta volviendo como una historia, que presiento que tendre que volver a empezar,
como un cuenro de hadas que algun dia volvere a contemplar...