Hubo una vez dos niños que jugaban a amarse...
Testigos de un sol que brillaba solo para ellos...
Que inventaron un cuento de amor sin final...
Que descubrieron juntos la magia de mil sensaciones nuevas...
Que creyeron un mundo de a dos tan perfecto y tan suyo...
Que prometieron no separse nunca...

La torpeza de sus años, quizá...
Los llevo a alejarse...
Y cada distancia y cada encuentro...
Y el tiempo que pasaba....

Y hubo una vez un hombre y una mujer, que volvieron a encontrarse...
El sol seguía brillando... como siempre...
Era una tarde imprecisa... Pero mas suya que cualquiera....
Y los restos de un amor encendieron las cenizas de un te quiero, dejado en el olvido...

Y ese hombre,
Que alguna vez fue niño
Tan distinto que antes,
Tan igual como siempre...
Quiso volver a tenerla en sus brazos....

Y esa mujer,
Que alguna vez fue niña...
Volvió a estremecerse con un beso...

Y la mujer se fue, sin dejar huellas...
Y el que se preguntaba por que no podrían volver a ser niños...
Y ella que intentaba apagar las cenizas de un amor tan lleno de vida....
Y ella...tan llena de miedos...