Mi pecho se aprieta mi mente colapsa y me siento presa de tu tibia mirada. Comienzo a perderme en tu cuerpo caliente aquel que me abriga protege y enloquece. Tengo conciencia voluntad e inteligencia pero cuando conmigo estas de eso ¿qué queda? No te amo solo te quiero pero soy tan tuya que muero. Abrazame aprietame en silencio después de todo este es nuestro secreto. ¿Qué importa si miran? ¿qué importa si hablan? ni siquiera imaginan qué pasión nos atrapa.
Texto agregado el 30-11-2003, y leído por 183 visitantes. (2 votos)