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Venías caminando, yo no te sentía
Uno, dos, tres
Susurrabas a mi oído, yo no te escuchaba
Uno, dos, tres
Buscabas mi mirada, yo solo te esquivaba
Uno dos, tres
Encontraste mis labios
Uno, dos, tres
Que sabor tan amargo
el que tu boca arroja
Que caricia perdida la que tu mano ofrece
Que preciso momento en el que al fin te fuiste
Uno, dos, tres.
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Texto agregado el 04-03-2006, y leído por 204
visitantes. (1 voto)
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Lectores Opinan |
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22-04-2006 |
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Es un texto cruel!!! Aunque de hecho la crueldad es dulce, después de todo, y si tu crueldad te cobija serás dulce dolorosamente... Xa_vo |
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