Quisiera escribir mil historias, en las que las letras fluyeran a través de mis manos. Rememorar aquellos años que fueron tan especiales, recuerdos no olvidados en el fondo de nuestros corazones, que fueron uno y ahora son dos.
Aquel concierto, aquella noche que mientras pensabas en mí en tu balcón escribiste aquella carta, aquella comida en tu casa con toda la gente del verano.
La lluvia con su agua limpió, arrastró a todos los que estábamos y ya no somos. Aquella inocencia fue desapareciendo sin que nos diera tiempo a darnos cuenta de que ya no estaba.
Como poder expresar aquellos momentos que nos marcaron, que hicieron que empezáramos a mutar nuestras conciencias hasta lo que ahora somos, diferentes.
Simplemente ahora mientras me concentro en relatarte estos pensamientos veo lo enorme, lo grandioso de los sentimientos entrecruzados a centenares de kilómetros, aunque sea un simple instante, algo dentro se despierta y aparecen nuestras imágenes dentro de esa mente tan lejana y cercana a la vez.
Hemos cambiado interna y exteriormente pero seguimos sabiendo agradecer un leve recuerdo, que se convierte en una agradable sensación de conocimiento mutuo, de vida después del paso del tiempo.
Ahora, en este preciso instante, mientras lees esto pensarás en mí, percibirás que no he cambiado, sabrás por las historias que te cuento año tras año que sigo siendo igual, aquel loco despreocupado.
Ahora, mientras escribo este breve pensamiento, pienso en ti, siento que sigues siendo aquella niña que sonreía y llenaba todos los rincones con aquella voz que rebosaba ilusiones. Nada más lejos de la realidad.
Me alegro tanto de que tu vida este llena de proyectos e intento imaginar que tú haces lo mismo.
Siento que tendré tu amistad siempre, muy pocas veces he puesto la mano en el fuego por alguien y he de decirte amiga mía que por ti la puse hace mucho tiempo.
Esta historia que cuento como ya dije antes, podría contarse de mil formas y maneras, cada una con un contenido diferente pero con el mismo sentido, la amistad que hemos concebido entre los dos, esta fuera de los problemas y mal entendidos del resto.
Esta historia es la que salio hoy de mis manos para que tus ojos la lean.
Un último suspiro, un amigo siempre.