Una rosa para ti,
la corté de mi jardín,
y hoy que estás aquí,
mi alegría no tiene fin.
Es inmensa la felicidad,
por tenerte a mi lado,
que por una eternidad,
yo seré tu enamorado.
Enlazadas las manos,
unidos los cuerpos,
así nos trasportamos,
tu y yo al fuego.
Sublime el momento,
lleno de pasión,
bendigo cada encuentro
que tenemos tu y yo.
Mil besos en la boca,
que linda realidad,
tu ser me provoca,
mucha felicidad.
Con tus brazos cobijas,
calcina tu cuerpo,
suave te deslizas,
y detengo el tiempo.
Todo ha concluido,
otro día será,
me quedo rendido,
y esperando ya.
Mañana ha de ser,
encuentro de amor,
gracias linda mujer,
me das lo mejor.
Gocemos ahora,
entrega total,
digna y gran señora,
siempre te he de amar. |