Te miro y te siento débil
Te tomo las manos y son como flores.
Mis ganas de sentir tu olor son como alas sin volar.
Porque estás lejano y nada queda del sol en nuestros cuerpos fríos.

Te miro y toco tus dolores.
Me pronuncias verdes árboles y días sin tiempo.
Caminas por la tierra dulce.
Y vas dejando atrás lo salado de tu alma.

Te miro y te siento débil.
Tomo tus versos y suenan huecos.
Canto recuerdos en tus sueños.
Despiertas frágil, sin senderos.

Te miro, te tomo, te beso.
Me respondes hermoso.
Te acaricio suave.

Me miras, me tomas, me besas.
El humo de tu cigarro se transforma en verso.
La angustia es sol.
El tiempo se fue junto al viento.