La obra en la cual me fundamento para hacer este comentario critico, platea las preguntas que trata Aristóteles, pero en la interpretación de Tomás de Aquino. Las cuales en particular movilidad se pueden sintetizar o dar una cualidad de la verdad de las cosa, más no la verdad misma. Al decir que se pueden sintetizar no hago referencia a reducirlas, pero si a darles mayor comprensión, más aún, otro contexto sin variar el contenido original. Como cuando se pregunta “si algo es tal” o “que algo es”; podemos decir “por qué es tal” o “qué es” a si se pregunta solo por el “qué es” o mejor dicho el término medio del silogismo.
Estas preguntas son muy importantes: “Si algo es tal”, “por qué es tal”, “si existe” y “qué es”. Pero lo más interesante es que Tomás lo reduce a la movilidad o pregunta por el término medio, comentando que Aristóteles dice: “… cuando preguntamos si una cosa es esto o aquello, o simplemente si existe, no hacemos otra cosa que preguntar si esto se puede saber por algún término medio del silogismo”
Ahora bien considero que, el referente historicista llevó, a negar que la presencia del pensamiento de Aristóteles en la doctrina filosófica de Santo Tomás, y su utilización al servicio del saber teológico o de la “doctrina sagrada”, respondiese a una opción intrínsecamente asumida y coherente con la orientación de su tarea de filósofo y teólogo.
Tomás de Aquino llevo a la razón de Aristóteles por el sendero religioso, pero esto no implica que no contenga gran cantidad de racionalismo, considero que su racionalismo se funda en ese intento de demostrar la existencia de Dios basándose en el análisis de lo aristotélico.
Pero por el momento me conformare con mencionar la importancia del término medio, el cual se manifiesta como el más importante dentro de esta obra. Por que: “… la causa, es el término medio de una demostración que produce verdadero conocimiento, porque conocer es conocer la causa de la cosa… la causa es el termino medio de la demostración”. Si aplicamos las preguntas antes mencionadas a un argumento, cualquiera que este sea, como por ejemplo “la casa es roja” podremos inferir de inmediato: ¿la casa es roja?, ¿Por qué es roja la casa?, ¿existe una casa roja? Y ¿Qué es una casa roja? Luego entonces apreciamos como Aquino aplico y considero que solo se esta hablando de una cosa la casa roja pero, más aún, si esa casa existe y es tal, si la casa roja se coloca dentro del silogismo, podremos apreciar que se llega a la movilidad y propiedad del termino medio, el cual nunca dará la verdad pero si el argumento más fuerte y convincente de las premisas. Para poder entender la existencia de tal argumento.
Como se puede apreciar la metodología de Tomas es correcta, al igual que la de Aristóteles, de eso no cabria duda alguna. Lo interesante de estar a favor de esta tesis es que uno puede comprobarla un sinfín de ocasiones, estando del todo comprometidos con las argumentaciones, verificables.
Las tesis de Tomás son de un argumento aristotélico sostenido en la confiabilidad del termino medio, nos lleva a la comprensión del que existimos y sobre lo que existimos, con la sola verificación y posibilidad de cualquier argumento bien planteado y convertido a términos aristotélicos, no es casualidad que la postura de sustento sea la relacionada a la lógica aristotélica, conducida a lo divino incluso, si se persigue la cualidad de una sustancia, un ente, una razón, entre otras solo se hace lógica y listo cual barita mágica se da por argumentada la veracidad de la tesis.
Solo podríamos encontrar una pequeña dificultad, la cual radicaría en que el término medio no permite una verdad, solo nos conduce a ella, el término medio nunca es conclusión de una premisa, el término medio no pasaría nunca a ser resultado final. Entonces solo estaríamos comprobando la veracidad y la existencia del término medio, más no, que este sea un resultado como tal, podemos decir y argumentar la cualidad y movilidad del término medio, pero nunca su verdad.
Pero esto se solucionaría, con la cualidad del mismo termino medio que nos permite, ponerlo como resultado final en otra figura o incluso en la misma, estructurada de distinta manera, por eso la importancia de el cambio de las preguntas, las cuales como ya mencione, nos permiten llegar a la diferente concepción u interpretación de la cosa buscada, pero sin cambiar el objeto del cual se habla. Entonces ya no existirá así duda alguna de la tesis de Tomás de Aquino con su fundamento aristotélico.
Para poder interpretar la cualidad y valor del término medio se plantean grandes, aplicaciones, en las pruebas de la existencia de Dios de Tomás de Aquino. Ahí es donde se puede apreciar la gran libertad que se usa y se sigue usando, por esto considero que ni el silogismo aristotélico esta agotado, más aún, las funciones del termino medio en la interpretación de Tomás son más que correctas, están bien planteadas.
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