dijiste que querías ser mi primera dama;
y entre mis sábanas lo has conseguido,
si quieres saber más
pregúntaselo a tus nalgas…

…pero para el escenario de vida
mejor se lo dejamos a las sombras…

no querría quejíos marchitos por el amor;
que si me he crucificado en tus ojos,
ha sido por la voluntad vencida en los ensayos
viendo como se cimbreaban los pliegues de tu falda…

…pero sin gemidos desearía las palabras
y sólo las dudas del guión bajo los focos casi apagados…

adoro envolverme en tu aliento;
sentir que eres la única ropa que deseo vestir
bajo las caricias de la ducha,
quiero que tu saliva sea mi perfume…

…pero no busco, todavía, los rosales celestes
como para discernir cuál es la rosa de maravilla…

al fondo, el ballet enseñorea el vacío espacio;
mientras te digo qué deseo de ti
tratando de mirarte sólo a los ojos,
sabiendo que si tiemblo a tus labios…

…la fuente fría en la noche habrá sido derrotada
porque mis demás ya nos habrán visto…

yo sólo quería dirigir desde lo oscuro de un guión;
pero tú me has bajado a los escenarios incendiarios
de las revoluciones callejeras de gemidos,
desnudas entre paredes y mordiscos a las palabras…

…que en el espectáculo no debemos enamorarnos
de los personajes que sabemos que nunca podrán llegar a nuestras camas…