Luna, el payaso triste
Luna era tan solo una niña, cuando descubrió que solo podía aparecer al caer la noche.
Tenía un amigo lejano que se pasaba el santo día brillando y dando calor, se llamaba Sol, pero solo coincidía con él durante unos breves instantes, cuando Sol se iba a dormir.
Hola Luna.-decía Sol
Hola Sol.- Cuando podremos jugar juntos?
No sé, Luna, estoy muy cansado y me gustaría dormir.
Y así Sol se marchaba diciendo lo mismo día tras día.
Luna escondida, siempre observaba todo lo que pasaba cuando Sol estaba trabajando, le gustaba las risas que provocaban los payasos en los niños y en los mayores, le gustaba la música y como lucían la flores, anhelaba conseguirlo ella también.
A Luna le parecía que su vida era un poco aburrida, porque cuando ella aparecía apenas había alguien con el que poder hablar, nadie se reía y las flores se escondían tras su mirada.
Así que una noche decidida a conseguirlo, se vistió de payaso e interpretó la canción mas bonita que se haya escuchado jamás, ..de repente, como si de un milagro se tratara, el mundo se fue llenando de luces, la gente salía de sus casas para oír tan bonita melodía y Sol que estaba durmiendo, se asomó para ver que estaba ocurriendo. Asombrado de oír a Luna decidió iluminarla y proyectó toda su luz sobre ella para que el mundo pudiera disfrutar de tan magnifica función.
Desde entonces, la noche dejó de ser tan oscura, y una vez al mes, Sol ilumina a Luna dejando que el mundo aprecie todo su esplendor.
Fin. |