Increíblemente, el destino te lleva por negras sombras, por la que pasas, gélidas grutas sinuosas frías y húmedas. Resurgen imágenes olvidadas, personajes de dibujos, iconos de tu vida, tu vida duerme bajo la pluma del destino.
Quizá tu futuro ya esta escrito mucho antes de que disfrutes del presente, quizá no disfrutes mas la vida porque este ello inscrito en tu destino, quizás hojas de cerezos resbalen aposta para rozar tu mejilla, quizás mi destino me mando hacer esto aun antes de que te conociera, quizá nunca te conozca y tenga que permanecer impasible ante la imposibilidad de nuestra nada, nuestra todo.
Pero juro por dios, que no me quejare mas como ya me he quejado, juro, que nada pasara por mi pasividad, juro que mis mas doloridos sentimientos, lucharan eternamente si hace falta por no volver a serlos.
La triste luna llena nos mira de reojo en la tranquilidad de la noche, el destino ha vuelto a hacer de las suyas, son las doce menos cuarto, estoy apunto de embarcar de nuevo, un nuevo viaje que acaba, una nueva espera para el próximo comienza. Los minutos pasan de seis en seis, la luna me observa, la luna nos observa, pues no estoy solo, ella aunque no lo sepa, esta conmigo.
|