CAMINABA BAJO EL FRÍO
DE UN LEJANO AMANECER,
CUANDO TE ENCONTRÉ ANTE MI,
TU MIRADA ABRAZÓ MI ALMA
Y FUE DEMASIADO TARDE YA,
PARA ARRANCARTE DE MI MENTE.

HOY TE OBSERVO EN SILENCIO
Y TUS OJOS YA NO BRILLAN COMO AQUEL DÍA...
ESTAS TRISTE, TIENES LA MIRADA PÉRDIDA
Y LAS MANOS TEMBLOROSAS...
PRESIENTO UN DOLOR EN TU CORAZÓN,
QUISIERA QUE ENCONTRARAS MIS CARICIAS,
EN ESTA NOCHE OSCURA, QUE TE OFRECEN
LA TRANQUILIDAD QUE NECESITAS...
OJALA DESCUBRIERAS ESTE DESEO DE TENERTE QUE LE CONFESÉ AL SILENCIO,
PARA QUE MI BOCA SE ADUEÑASE DE TUS BESOS
Y EL FRIO QUE GRAVÓ AQUEL AMANECER, DESAPARECIERA PARA SIEMPRE.