lás mesas de la casa de Té estabán llenas de bebedores con exepción de una dónde él Té se enfriaba con el pasar de las horas mucho mas frio en las horas siguientés míentras lás miradas átonitas de los clientes disputabán diplomaticamente las dos tazas de Té en el bacío espacio Juan_Poeta
Texto agregado el 19-01-2006, y leído por 273 visitantes. (1 voto)