Si supieras


Esclavo de tus caderas y preso de mi mente, no soporto aguantarte ni escribirte una canción.
Si supieras las cosas que pienso cuando me acerco a ti, tal vez no quiero que las sepas, pero no aguanto, ni me aguanto.
Para qué alejarme de ti, si no estás conmigo, para qué abrazarte si mis brazos están cansados, y no aguanto, ni me aguanto.
Si supieras las cosas que siento cuando me acerco a ti, si supieras que no aguanto, ni te aguantas.
Esclavo de tus caderas y preso de mi mente, no soporto aguantarte ni escribirte una canción.
Si estuvieras a mi lado dejaría de latir mi corazón, y no hay explicación, porque no te aguanto ni me aguanto.
La herida del abandono es difícil de cerrar, no quiero que regreses aunque sé que nunca te fuiste.
Y me río de mi tristeza, de mis mejillas empapadas, pudiendo ser feliz a tu lado porque te sigo amando y no podría dejarte, pero no te aguanto ni me aguanto.
Si las cartas marcaron de nuevo tu nombre, y mi destino creó una duda, no soportaré extrañar los caprichos de tu corazón.
Esclavo de tus caderas y preso de mi mente no soporto aguantarte ni escribirte una canción.