El ocaso, lo recuerdo bien, tal como si hubiera sido ayer; el sol ocultándose tras el horizonte, su luz, esa vez no le prestaba atención, no la puedo recordar con claridad, pero como puedo recordar el calor que recibía. Ahora la luna suple aquella luz y el fuego aquel calor, las estrellas juntas forman una manta que me puede proteger junto con el color de la noche.

Oh! la luna, ¿puede ser tu inmensa alma? La oscuridad de la vida y la muerte, la hermana de aquel que se dice llamar sol, mi mas grande enemigo, ¿acaso es verdad que lo amas tanto? por que ustedes los mortales lloran cuando el se oculta tras aquella manada de nubes ¿acaso no ven que solo esta jugando con ustedes?. Pero a pesar de todo quisiera poder verlo una vez mas, la luz de mi alma ¿ahora donde estará? Me arrebato mi sueño, mi ilusión, ¿acaso esto es lo que pedí?. ¿acaso esta es mi condena?

El recuerdo de aquella noche no se puede olvidar, nunca lo olvidare es imposible, mas bien se me es imposible. Aun escucho el agua rebotar sobre el techo, los murmullos de la gente que no prestaban atención a aquella escena, en lo alto una sombra, mas bien una silueta que se acercaba lentamente con un paso rítmico, me encontraba en un callejón sin salida ¡me había acorralado!, la luz se posó sobre su rostro y destallaron unos ojos que me hipnotizaron, ojos en donde se refleja el fuego, el dolor y desesperación por querer poseerme.¡Pero que hermosos ojos! Te daban paz, tranquilidad, y poco a poco estaba olvidando el temor que sentía. Después el éxtasis me alcanzo en un profundo deseo sellándolo con un beso que me pareció eterno, miles de imágenes sobre mi mente, figuras hermosas que me daban paz y tranquilidad pero a la vez espantosas que deseaba escapar salir corriendo, pero algo me detenía, si, eran esos brazos que me sostenían con una gran fuerza, y de pronto una nueva vida estaba dentro de mi, la sentía, podía sentir un nuevo liquido dentro de mi "la sangre" aquello colmillos aferrándose a mi cuello y luego mi boca aferrándose a su cuerpo queriendo mas y mas saciarme de ese nuevo sabor que ahora en mi brotaba, pero ese momento me cambio totalmente, arraso con migo el amor que tenia y ahora no siento nada, quisiera sentir de nuevo a lo que tu llamas felicidad y amor, lastima que en eso en mi ya no existe, se a marchado, y ahora mi mas grande castigo es seguir viviendo por la eternidad con el sufrimiento de mi oscura soledad y de mi alma.

Mi espíritu esta encarcelado con grandes cadenas y el llamativo color rojo de las llamas que bajo la penumbra lentamente se consumen; ya nada me puede liberar, ni tu mas grande luz ya que ni un pequeño destello pude atravesar mi tumba.

Mis sueños están rotos ya no tengo razón para seguir en una muerte en vida, ya que este sufrimiento no lo puedo arrancar, mas sin embargo tu pequeño signo vital me mantiene radiante, para acompañarte cada noche que te entregas a mi sin saber por que. Ya que eh estado esperando por tu luz para iluminar mis tinieblas.

Continuara....