Carpa estática Carpa tímida que atenúas nuestras vergüenzas, Carpa que haces que llegue la luz Y no nos atajen nuestros calores. Aguantas lluvias de clavos que Gimiendo abren tus carnes Para que sufras ceguera. Te mantienes regia durante el vendaval, El viento traspasa tu techo De agujeros lleno. Y en el suelo los clavos se oxidan, Por el salitre, el sol que los alcanza, La inmovilidad después de tan Larga caída. Aguadulce, enero de 2006 José María de Benito
Texto agregado el 05-01-2006, y leído por 124 visitantes. (1 voto)