Inicio / Cuenteros Locales / sendero / El ave**
El ave.
Me sentí incomodo, como el niño que es pillado. Lo sabía, pero por extraña razón, no lo había resuelto, ahora la compañera al observarme, recriminaba.
— ¡¿No te da vergüenza tener las uñas de los pies tan largas?!
No dije nada, sólo asentí con la cabeza. Tenían más de un mes de crecer. Noches después soñé repetidas veces que surcaba rompiendo los vientos del desfiladero; mi alegría sin fin era cuando me zambullía y regresaba a los cielos con un pez en mis garras. ¡Cómo disfrutaba mirando las estrellas y los amaneceres donde el sol inflama!
Me vi inmerso en los sueños de Leonardo, cuando en la montaña veía el águila sesteando en las planicies del cielo. ¿Alimentaría mis noches el deseo de ser pájaro? ¡Cómo no serlo!, si mis ancestros Totonacos aun bailan la danza del volador y cuando el guía da la hora se lanzan al vacío, sobre el viento, mientras la flauta ata el ayer y el hoy con una oración que trota por las montañas del alma. Por un instante el cuerpo cardenal se convierte en pájaro.
Reconfortado, dormí pensando en la travesía que hacen las garzas. Un día en la mañana mis uñas lucían rectas, recién cortadas y la compañera, cerrando el ojo me decía:
— A ti, hay que tratarte como bebé. Y mostró los pedazos de córnea que había depositado en un frasco transparente. No tenía objeto una discusión. Me sentí como si me hubieran cortado las alas.
Meses después una dolencia se instalo en los talones y tras de observar la radiografía, el médico me dijo: Tiene los espolones más grandes que he visto, sin duda es usted un gallo viejo que debió haber rascado mucho entre la tierra.
|
Texto agregado el 10-11-2003, y leído por 757
visitantes. (9 votos)
|
|
|
Lectores Opinan |
|
|
|
|
|
|
18-11-2003 |
|
Que sorpresa de cuento, me gusta, y quien sabe que ocurre cuando soñamos, abrazos y estrellas burbuja |
|
| |
|
|
15-11-2003 |
|
Aves y sueños..., ¡y qué aves, y qué sueños! Excelente. Saludos, Praprique |
|
| |
|
|
11-11-2003 |
|
Sentirse ave, con las alas desplegadas en vuelo sideral, con las garras afiladas necesarias para sobrevivir.
Vuelos entre montañas y desiertos y luego la realidad, escarbar y escarbar en la tierra, como buscando un tesoro, la palabra perdida, la ilusión. Ciegos, siempre ciegos, buscando lo que no hay. Un beso, Ruben, leí varías veces para aprender la lección. meci |
|
| |
|
|
11-11-2003 |
|
"la doble realidad"..tal cual te lo escribe Daniel...y claro, en Ud...que otra cosa podría esperarse que la "pura sorpresa"....y yo, pájaro de alma....se imaginara hasta donde me sentia identificada....piquitos en tu corazon Ruben ...menos mal que las estrellas abundan en el cielo, asi puedo dejarle montones y montones gaviotapatagonica |
|
| |
|
|
11-11-2003 |
|
Me gustó, me gustó muchísimo... la crueldad de la pseudo vida real es terrible, la vida real de los sueños es la que nos permite seguir aquí... por favor no dejes que te corten las alas de la literatura, eres realmente un buen cuentero.
Mis estrellas y mis genuflexiones. rithza |
|
| |
|
|
Ver todos los comentarios... |
|
|
|
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login
|
|