Muero por ti, aunque seas mi vida.
Para mi el amanecer
ya no es cuando el sol
se asoma entre las montañas,
sino cuando tu sonrisa
se asoma entre tus labios
No hay noche que no sueñe
con tus tibios labios
no hay noche que no sueñe
con tu tierna sonrisa
Aunque seas mi vida, muero por tí.
Rie, que yo lloraré por ambos
alégrate, que seré yo quien
cargue con las penas de los dos
No calles, que el silencio es
muerte y para mí es bienvenida,
ya que la vida sin tí es agonía
No hay día que pueda vivir
sin sentir tu aliento o tu piel
no hay día que pueda vivir
sin oir tu voz, sin oler tu aroma
Muero por ti, aunque seas mi vida.
He soñado incontables veces
con que con cariño tomas mi mano
e inmediato escalofrío
trepa por mi espalda
Tus caricias son brisa suave
que cual común respiro tuyo,
da vigor y aliento al alma mía.
Son dulce canto al tacto,
eco del palpitar de tu corazón,
salobre almibar, árida humedad
Aunque seas mi vida, muero por tí.
Si daría mil vidas por tomar tu mano,
¿qué no daría por sentir tus labios en los mios?
Nada hay que no daría por ti al instante
¿Quieres mi corazón? Ya es tuyo hace tiempo
¿Quieres mis sueños? Tómalos, estás en todos
¿Quieres mi vida? Es tuya, nada sería sin tí
Cada respiro que doy susurra tu nombre,
al verte mis ojos gritan de tanto brillo
grito que resuena en cada parte de mi ser,
solo al sentirte el grito es aplacado.
Muero por ti, aunque seas mi vida.
Déjame ser sombra de la luz que emanas,
tomar toda oscuridad y guardarla para mí,
tomar toda dicha y regalártela.
Para poder estar siempre a tu lado,
poder persivir tu aroma, sentir tu respiración
estar cerca si algo falta, lejos si algo sobra
No quiero que pesares te persigan,
que dolores te aquejen o maldigan.
No deseo para tí nada más que la
alegría que me da al ver tus ojos.
Aunque seas mi vida, muero por tí.
Tu corazón y el mio conoceran poco de amor
pero saben mucho de éste y lo guardan con recelo.
Abre el tuyo a quienes te queremos,
para los que eres todo.
¿Qué sería de mi sin ver tus ojos?
¿Que sería de mí si no puediera
acariciar tu cabello, sentir tus labios,
perderme en tu voz, encontrarme en tu risa,
retener el beso con tu nombre o liberarlo?
Muero por ti, aunque seas mi vida.
Te conozco de pies a cabeza, de mente a corazón.
Me sé de memoria tus muecas y miradas,
tengo contados los lunares de tu cara,
y cómo olvidar tu aroma y textura.
O pienso en tí, o estoy contigo, no hay más,
Tengo tu cara grabada en mi mente,
pero más en mi corazón, más tuyo que mío.
No soy capaz de olvidar cada momento contigo
cada abrazo, caricia, beso, que espero regresarte,
Eres tanto para mí, como el celeste astro
a esta pedecedera esfera, o incluso más.
No sales de mi mente nunca, y no espero que lo hagas. |