Una sombra se acerco a tu lecho, parecías morir
Cuando di la vuelta esperando no hallarte de regreso
Habías renacido, estabas mas vivo que nunca
Parecías haber despertado
Y yo entre asombro y dicha no supe que hacer mas que alejarme
Ya no necesitas de mi.
Has renacido, yo me aferraba a tu agonía
A la necesidad que emanabas
¡Que útil!
¡Que viva!
me sentí mientras morías, ahora solo sonríes y te vas.
Me quedo sola de nuevo con un gracias con eco que mas parece despedida...
Texto agregado el 16-12-2005, y leído por 130
visitantes. (1 voto)