NEGRA NAVIDAD.

-Querida, esta Navidad económicamente estamos mejor, y le regalaré a Carlitos un poco de dinero. Incluso, arrendé un disfraz de Viejito Pascuero para entrar por la chimenea y darle la sorpresa.

-Que bueno, siempre se queja por los regalos. Lo vi entusiasmado escribiéndole una carta al Viejito. Pero no me ha dejado leerla.


Casilla # 0
Latitud 0, paralelo 0. Polo Norte

Querido Viejito Pascuero:

Todo el día escucho:
!Navidad, Navidad, blanca Navidad!
Que mierda. Para mí es negra, es lo único que veo. Nací ciego. El primer regalo que recuerdo fueron unos calzoncillos. Seguro te asesoraste con mi abuelita, ella siempre me regala eso en mi cumpleaños. Las Navidad siguiente, calcetines, luego poleras. Que no sabes que la ropa va quedando chica y yo crezco muy rápido !Malditos calzoncillos apretados! Gordito, eres el culpable de que mi amiguito se deformara para el lado.

!Sabes! Te pediría una mujer de regalo, pero no me gustan las enanas para que me traigas una duenda y, luego de 9 meses, me cargue un hijo debido a sus polvitos mágicos con otros duendes.

Por favor, de todo corazón, ojalá puedas regalarme la visión. Dicen que soy ciego de nacimiento y que lloré mucho en el parto, por culpa de un experto jugador de bolos disfrazado de doctor que jaló de mis ojos para sacarme del útero. Y si no puedes Viejito, tráeme algo útil, algo que no puedo pedirle a mis padres. Una revista con mujeres guapas que nunca se resfrían, con hojas perfumadas y texturizada en modo Braille. !A quién engaño! Jamás un regalo decente, pese a nunca pedir nada en mis cartas y ser un niño bueno. Te descubrí, no lees ninguna carta. Este año te vas a joder. Empaparé con parafina el tubo de la chimenea y la encenderé justo cuando bajes. Ahí sabremos sí existen niños extraterrestres que vivan en el sol, o sí tu abrigo es de poliéster inflamable o de resistente piel de oso polar.