Ensayándome aprendí que no soy más que un payaso
Con escudo de cartón y casco de papel
Que se bate en retirada.

Los sentimientos avergüenzan y es mejor abortarlos
Antes que llevarlos como estandarte.

La lágrima llena la copa,
La copa se desborda y
Mancha el mantel en el que escribí
Tu nombre a cuadros.

El espejo me escupe
Un esperpento enojado con sí mismo
Por no saber reflejarse
Y en las noches sin luna
Asesina luciérnagas a las que roba su luz
Por pura envidia.

Calla, pero no otorga el beneficio de la duda,
Porque la duda mata,
La muerta es la nada y
La nada no se hace, sólo es.

El esperpento es una deformidad,
Una exageración o
La infravaloración de una realidad existente.
Es un intento primerizo,
Un fallo más,
Una conjugación errónea que
Provoca burlas.

Cabeza grande,
Pies pequeños y
Un estómago carroñero;
Una lágrima con una sonrisa,
Un zapato de cada color y
Unas letras mojadas de inexistencia.